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viernes, 15 de julio de 2011
Bajo el lema, Aprendiendo ciencia, tecnología y ambiente en equipo y a través de investigación, centros interdisciplinarios y servicio comunitario, el Centro Hemisférico de Cooperación en Investigación y Educación en Ingeniería y Ciencia Aplicada (CoHemis) del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM) llevó a cabo su quinta edición del campamento de verano titulado BETTeR-IC+2011.
Unos 37 estudiantes de los grados décimo y undécimo, provenientes de distintas escuelas superiores de Puerto Rico, participaron de la experiencia educativa, que contó con el auspicio del Departamento de Biotecnología Industrial (BIOTEC) del RUM, el Proyecto College Access Challenge Grant Program (CACGP) y las farmacéuticas Pfizer y Amgen.
De acuerdo con el doctor Carlos Ríos Velázquez, director del Departamento de BIOTEC, además de las acostumbradas actividades que celebran cada año, en esta ocasión, se enfocaron en que aprendieran sobre responsabilidad social y que se preocuparan por el medio ambiente.
“Quisimos enriquecer el campamento para que fuese de ciencia, tecnología, servicio comunitario y ambiente. Así, los participantes cuentan con algo más completo en distintas áreas. Por esto, lo que antes llamábamos Centros Interdisciplinarios, ahora siempre tendrían una actividad relacionada con ciencia, tecnología, servicios comunitarios y con ambiente”, sostuvo el doctor Ríos Velázquez.
Agregó que los estudiantes tuvieron que presentar, además de un afiche, una propuesta sobre un proyecto de impacto comunitario escolar. Para lograrlo, integraron talleres sobre voluntariado, visitas a la Isla Magueyes, en Lajas; y una noche de observación astronómica, entre otras actividades.
“Por ejemplo, ellos tomaron desde la perspectiva del ambiente, talleres que tenían que ver con composta, cultivo hidropónico y huerto casero, entre otros. Estos jóvenes están prestos y listos para generar composta en la escuela, para hacer un pequeño huerto casero, un huerto escolar”, aseguró.
Una vez finalizada esta experiencia de verano, los coordinadores esperan contactar a los estudiantes durante el año para darles seguimiento y apoyo a cada uno de sus proyectos.
“Los que salen del campamento son personas, ciudadanos responsables, preocupados por su ambiente, por su comunidad. No es nada más ir y decir: ‘me hablaron de ciencia’; es un componente integrado. Eso es lo que yo creo que hace la diferencia, porque me da mucha alegría ver los términos que ya usaban: investigación, acción participativa, las cosas que iban a hacer con la comunidad”, expresó.
Precisamente, los talleres fueron la estrategia educativa que les permitió transmitir el mensaje. En estos participaron, del RUM: el doctor Fernando Gilbes, director de CoHemis y del Departamento de Geología, la profesora Luisa Seijo, del Departamento de Ciencias Sociales y directora del Instituto de las Comunidades; el doctor Juan G. González Lagoa, del Departamento de Ciencias Marinas, y la doctora Sandra Cruz Pol, del Departamento de Ingeniería Eléctrica y coordinadora de Campus Verde. Asimismo, la profesora Awilda Meléndez, del Recinto de Aguadilla de la UPR; la doctora Aura María Rodríguez del Recinto de Río Piedras y los estudiantes graduados Irimar Torres y Frank Ferrer.
El doctor Ríos Velázquez señaló además, que como parte de la discusión sobre acción participativa que ofreció la profesora Seijo, los participantes del campamento analizaron distintos casos en comunidades.
Por su parte, el doctor Fernando Gilbes les habló acerca de posicionamiento global, mientras que el doctor González Lagoa se encargó del taller de astronomía que realizaron una de las noches del campamento. También, acudieron a la isla Magueyes, donde, entre otros, la doctora Aura María Rodríguez les habló de empresarismo y de biotecnología marina. Más tarde, disfrutaron de un pasadía en la playa en la Isla Mata de la gata, en Lajas.
“Este año, contrario a otros años, solo tuvimos estudiantes, fueron 37 participantes de distintas partes de Puerto Rico. Además, fue la primera vez que dos de los seis estudiantes mentores habían participado previamente en el campamento. Al salir, se dieron cuenta de que están listos para hacer lo que se propongan”, manifestó.
Este año aparte de la experiencia técnica el campamento se enfocó en la responsabilidad social.
Los estudiantes tuvieron la oportunidad de experimentar con la Biotecnología.
Los jóvenes durante una visita a la Isla Laboratorio Magueyes, en Lajas.
Fotos suministradas
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