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viernes, 15 de abril de 2011
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Pedro “Golo” Laracuente 1930-2011 (Suministrada) |
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Desde niño fue colegial. En esa época se paseaba y merodeaba por el campus, especialmente por las canchas de tenis. Fue desde entonces, que comenzó a desarrollar ese singular sentimiento que acarrea una mística que solamente entienden los que tienen "sangre verde": el orgullo de ser antes, ahora y siempre... Colegio. Sin duda, ese único sentimiento se reforzó cuando cursó parte de sus estudios universitarios en el otrora Colegio de Agricultura y Artes Mecánicas (CAAM), lugar en el que luego laboró como entrenador y profesor, y en el que dejó una imborrable huella.
Pedro "Golo" Laracuente Matías fue colegial desde su niñez hasta el instante de su partida, momento para el que ya había preseleccionado llevar los colores verde y blanco que estaban tan cerca de su corazón, y que combinaban perfectamente con sus ojos que ahora duermen.
Tras su deceso a los 80 años de edad, el pasado domingo, 10 de abril de 2011, las puertas del campus que tanto amó, se abrieron el lunes, 11 para rendirle un homenaje póstumo a este siempre colegial, polifacético atleta e inmortal del deporte.
Tal y como lo solicitó, su féretro fue llevado al Coliseo Rafael A. Mangual, y así se cumplió uno de los deseos que le expresó a su hija Maritza Laracuente, a quien le había indicado que quería el mismo funeral que le hiceron en la década de los setenta a don Rafa, en referencia a Mangual, su mentor y amigo.
Decenas de amigos y familiares se congregaron en el lugar para rememorar las gestas del que fuera entrenador jefe de Atletismo del Colegio, precisamente en momentos en los en que la institución obtuvo varios campeonatos en las Justas de la Liga Atlética Interuniversitaria (LAI).
"Sin duda alguna, Golo deja un legado y un ejemplo a seguir con todos aquellos que, de una u otra manera interactuaron con él, recibieron ese conocimiento y ese entusiasmo que les demostró. Quiero aprovechar esta oportunidad para dirigirme a los familiares de Golo y decirles que hay un Dios Todopoderoso, que es el Padre de toda consolación... Estamos diciendo un adiós temporal a nuestro querido amigo Golo, porque su alma se queda aquí en el Colegio, y vamos a estar recordándolo siempre", expresó el doctor Jorge Rivera Santos, rector interino del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM).
Asimismo, varios exrectores del Recinto se expresaron durante la ceremonia de recordación del renombrado deportista que se destacó en atletismo, tenis, béisbol, voleibol y baloncesto, y como entrenador de deportistas estelares en el tenis.
El licenciado José Enrique Arrarás, primer rector del RUM y comisionado de la LAI, vistió durante los actos los colores verde y blanco de la institución para así honrar a Golo, a quien le unían lazos estrechos de amistad.
"Cuando yo estaba comenzando la escuela superior, ya él era uno de nuestros héroes deportivos por su extraordinario talento en tantísimos deportes y en todos sobresalía. Para mí, era un ejemplo, lo quería inmensamente, era más que un amigo, era un hermano", sostuvo el licenciado, al tiempo que relató que ambos practicaron juntos los deportes de tenis y baloncesto.
Por su parte, el doctor Fred Soltero Harrington, segundo rector del RUM, recordó la trayectoria de quien además de su alumno, fue su amigo.
"Cuando Golo llegó al Colegio, era un atleta bastante desarrollado... Tuve el privilegio de que fue mi discípulo en 1954 en la clase de Química General... Desarrollamos una amistad como si fuéramos hermanos, por más de 50 años compartí una trayectoria con él... Siempre lo consideré como una persona extraordinaria, con un gran sentido humano... Y nunca perdió esa amabilidad, esa sonrisa, esa cortesía que siempre le caracterizó. Es una pérdida inmensa que se haya ido Golo", señaló Soltero Harrington.
Para Henry Newman, secretario de Recreación y Deportes de Puerto Rico, uno de los aspectos más importantes de su gesta, fue el impacto positivo de su trayectoria profesional en los estudiantes.
"Sirvió de ejemplo para tantas y tantas personas. Utilizó esa posición que tenía como profesor, como experto en deportes para poder afectar de una forma positiva la vida de tantos jóvenes, en momentos donde el joven necesita un modelo positivo que lo guíe. En mi opinión, ése es el atributo mayor de la persona a quien le estamos rindiendo homenaje hoy", dijo Newman.
Asimismo, el doctor Manuel Ramírez, decano de Estudiantes, relató que Golo le ayudó para tener la oportunidad de desempeñarse con entrenador en el Recinto.
"Golo era este tipo jovial, campechano, bien abierto en opinión y en acción, siempre estaba dispuesto, como un corredor de 100 metros, a dar la salida y de forma única, un consejo", sostuvo Ramírez.
"No eres de nosotros nada más"
En una emotiva alocución, la periodista Nydia Laracuente, agradeció las muestras de solidaridad y cariño de las personas que le acompañaron en el Coliseo Rafael A. Mangual, tras el deceso de su esposo.
"Golo, hoy, mientras estamos aquí reunidos rindiendo homenaje a tu vida, sé que desde tu nueva morada, estás disfrutando al ver unidas a tantas personas que han sido muy queridas para ti. Mira cuánta solidaridad, cuánto cariño, cuánto afecto lograste sin proponértelo", expresó.
Agregó que su esposo consideraba a los jóvenes que entrenaba como sus hijos y siempre mostró su compromiso con éstos. "Buscabas lo mejor para ellos en su vida profesional sin dejar atrás su vida personal", puntualizó.
"No eres de nosotros nada más, hay mucha gente que te quiere, que te respeta y que te distingue, somos todos los que estamos aquí, recibe todo este cariño, adiós mi amor, hasta luego; descansa en paz. Golo Laracuente y su obra están ahí. Un beso grande, un abrazo con todas mis fuerzas. Pido un aplauso para él", concluyó.
CAAMpanadas del adiós
Tras la especial ceremonia, la Avenida Palmeras se convirtió en el punto de partida para el tramo final de lo que fue una fructífera vida. Al llegar la comitiva fúnebre al Edificio José de Diego sonaron las campanadas del Himno del Colegio. Allí, se sumaron las armoniosas voces de Corium Canticus, quienes entonaron en su memoria el "canto del Colegio hecho de un astral fulgor".
Desde allí, volvió al lugar preferido de su niñez, cerca de aquellas canchas y la pista que lo vieron desarrollarse como atleta. Allí, donde antes, ahora y siempre.... vivirá el recuerdo de Golo Laracuente.
Vídeo Reportaje  
Galerías de fotos
[Ver] Pedro “Golo” Laracuente.
[Ver] El Colegio le rinde homenaje póstumo a Pedro “Golo” Laracuente.
La periodista Nydia Laracuente (derecha) ofreció unas emotivas palabras de despedida para su esposo. A la izquierda Manuel Ramírez, decano de Estudiantes.
Las honras fúnebres de Laracuente se llevaron a cabo en el Coliseo Rafael A. Mangual.
Fotos Carlos Díaz / Prensa RUM
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