Más de doscientos estudiantes bailaron juntos al son de pegajosos ritmos de salsa, reguetón, hip hop, merengue y bachata, entre otros, en un ambiente divertido en el que todos pusieron a prueba sus destrezas artísticas. Lo anterior no formó parte de uno de esos eventos auspiciados por marcas famosas que invitan a los jóvenes en masa, sino que ocurrió un martes, durante la hora universal, en pleno apogeo del semestre académico en el Coliseo Rafael Mangual del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM).

Los colegiales fueron convocados a participar en una clase de zumba, organizada por la Asociación de Educación Física Adaptada del Recinto, en un intento por integrar aspectos innovadores a la hora de ejercitarse. El grupo de trabajo no solo vio la ocasión como una oportunidad de recaudar fondos para su recién creada entidad, sino como la excusa perfecta para involucrar a los estudiantes en actividad física y entretenimiento por partida doble.

La idea se le ocurrió al estudiante de maestría en Artes en Kinesiología, Adam Rivera Figueroa, como parte de la motivación por agregar herramientas innovadoras al curso de entrenamiento personal.

“Estamos empezando ideas nuevas para integrarlas al currículo; adaptar cosas nuevas que se han incorporado al deporte y a la educación física, especialmente, el entrenamiento aeróbico que tiene muchos beneficios para el sistema cardiovascular, entre muchas otras cosas. Esto es lo nuevo que está surgiendo y queríamos aportar la idea para atraer a los estudiantes a participar. La experiencia fue excelente, salió mejor de lo que esperaba”, admitió Adam.

Por su parte, los profesores Margarita Fernández y Carlos Quiñones, ambos catedráticos del Departamento de Educación Física, también se mostraron satisfechos por el éxito de esta primera actividad que planificó la Asociación, de la cual ambos son mentores.

“Hace como tres semanas que comenzamos oficialmente como asociación estudiantil y el propósito y la visión es de trabajo comunitario, de ir a esas comunidades con personas con impedimentos y darles actividad física o traer a niños con impedimentos a nuestras instalaciones y ofrecerles actividad física modificada, que es nuestra misión en el Departamento”, reiteró la doctora Fernández.

De hecho, una de las metas de la Asociación es continuar el esfuerzo del Campamento residencial deportivo para niños con impedimentos visuales, conocido como CAAMp Abilities del Departamento de Educación Física, que ya ha tenido una edición en Guatemala y, próximamente, se brindará en Costa Rica, aparte de su ofrecimiento en el Recinto.

Por su parte, el profesor Quiñones explicó que los fondos recaudados en el evento se destinarán en primer lugar a la iniciación de la Asociación y luego a los esfuerzos que incluirán en su agenda en beneficio de ese sector de la población. Agregó que parte del éxito de esta primera actividad que organizan se debe a lo innovador de este tipo de ejercicio, algo que servirá de motivación para los estudiantes de los cursos graduados de Educación Física.

“Esta es la nueva idea que queremos traer para enamorar a los estudiantes a la actividad física, que no es solamente irse a correr, hay otras maneras de hacerlo de una forma divertida”, aseguró el profesor.

Zumba: un ejercicio divertido

Lejos de una rutina agotadora de ejercicios a las 10:30 de la mañana, esta mega clase de zumba parecía una gran fiesta en la que sus participantes no dejaron de reír, pero tampoco pararon de moverse al ritmo de la música que les apasiona.

A juicio de la instructora, Mayda González, ese es precisamente el secreto de Zumba®, un programa de acondicionamiento físico que utiliza el baile con los ritmos latinoamericanos como la salsa, la cumbia, el merengue, la bachata, la samba y el reguetón, entre otros, en el que las personas no sienten que están realizando una rutina porque se divierten.

Aunque Mayda ofrece varias secciones de zumba en el Recinto, los lunes, miércoles y viernes en la tarde en el patio interior del Edificio de Enfermería, y ha formado parte de un sinnúmero de maratones, admitió que fue impresionante dirigir ella sola a más de 200 personas.

“Para mí fue una experiencia increíble. Traté de escoger la música de manera especial porque sé que son jóvenes y logré que se quedaran todos hasta el final. Por lo visto, lo disfrutaron y eso es lo importante. Cuando ves que las personas se disfrutan la experiencia, significa que lo hice bien”, relató la instructora quien comenzó a dictar clases de zumba en el 2006 y posee certificaciones en varias modalidades como Zumba Gold, para personas de edad avanzada; Zumbatomic, para niños; y Aqua Zumba.

Uno de esos grupos de jóvenes que se gozó la experiencia de principio a fin fue el integrado por Luis A. López, Marlín Soto, Nitzka León y Mario López, todos estudiantes de primer año del Colegio.

“Es bien entretenido porque hicimos ejercicio a través del baile que es una forma que no se ve como una rutina sino como algo que te entretiene. Es la primera vez y lo volvería a hacer”, aseguró Marlín, quien estudia Contabilidad.

Otra novata que repetiría la experiencia es Nitzka, alumna de Historia, quien catalogó la actividad como una muy divertida porque “haces ejercicios y no te aburres”.

Los profesores Fernández y Quiñones esperan poder repetir el exitoso evento, al que sumarán otras actividades. Agregaron que a la Asociación de Educación Física Adaptada pueden integrarse alumnos de todas las concentraciones, con el único requisito de que estén comprometidos con ayudar a las personas con necesidades especiales e impedimentos.

Alrededor de 200 estudiantes se dieron cita en el Coliseo Rafael Mangual para ejercitarse en una clase de zumba. (Suministrada)

El evento fue coordinado por la Asociación de Educación Física Adaptada.

La misión principal de la actividad fue involucrar a los colegiales en actividad física de una forma divertida.

La instructora Mayda González, acompañada por el estudiante Adam Rivera, a la izquierda y otro de los participantes en la clase de zumba.

Fotos por Idem Osorio / Prensa RUM