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viernes, 26 de marzo de 2010
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En el desfile de apertura se destacaron los símbolos colegiales, los del cultivo de la Tierra y los Juegos Centroamericanos y del Caribe 2010. |
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La luz brillante del sol azota fuerte encima de las carpas repletas de plantas, frutas, vegetales y flores que no pierden su belleza, su color o su deliciosa apariencia. La presencia de vacas, cerdos, ovejas, conejos y caballos dan la sensación de estar dentro de una granja. Los pequeños cargan orgullosos diminutos pollitos de colores y los más grandes llevan arbolitos y dulces del País. El ambiente se impregna de aromas con sabor a frituras y canastas de plátano rellenas de carne. A lo lejos, la música de un cuatro y un conjunto típico inspiran a un trovador.
La anterior estampa se repite anualmente bajo el calor y cielo azul de la primavera boricua en el Recinto Universitario de Mayagüez (RUM), que por los pasados 33 años celebra la Feria Cinco Días con Nuestra Tierra. El evento, organizado por los estudiantes del Colegio de Ciencias Agrícolas (CCA), no solo resalta el valor de la agricultura puertorriqueña, sino que ha servido para unir lazos con la comunidad del Oeste a través de las décadas.
La tradicional Feria revalidó una vez más su éxito este año con la visita de miles de personas para disfrutar las exhibiciones agrícolas, los platos típicos, los espectáculos artísticos y las artesanías, entre muchas otras atracciones.
“Me siento muy privilegiado de saber que vienen miles y miles de visitantes, más de cien mil personas y que se lleven un poquito de lo que es la agricultura en Puerto Rico. Muchas personas piensan que el alimento crece en las góndolas y no es así, es un proceso bastante arduo y trabajoso para tener un plato de comida en tu mesa. De eso es que se trata la Feria, de educar al visitante”, aseveró Adalberto De Jesús, a quien esta vez le tocó dirigir la organización.
El estudiante de Extensión Agrícola del CCA, agradeció la labor realizada por todo el equipo de trabajo, que este año dedicó la Feria al tema de la energía renovable por la relevancia que tiene en el ámbito del cultivo de alimentos, de manera que se suplan las necesidades de la población actual sin comprometer a las generaciones futuras.
“Tenemos que proteger nuestra Tierra, la que nos va a ir dando el alimento día a día. Sin agricultura no hay comida y sin comida, no hay vida. Estamos dependiendo en más de un 90 por ciento de alimento importado de otros países y tenemos que disminuir ese número porque uno nunca sabe cuándo puede ocurrir una catástrofe como están pasando en estos tiempos y no podemos depender de alimentos de afuera, tenemos que empezar a producir aquí”, reiteró.
Cinco Días con Nuestra Tierra inició el pasado 16 de marzo con el esperado desfile a través del campus en el que se destacaron los símbolos colegiales, los relacionados con la siembra y la Tierra y hasta el orgullo de ser sede de los Juegos Centroamericanos y del Caribe 2010.
Aparte de las exhibiciones, la actividad incluyó un componente educativo a través de diversos foros y talleres que trataron temas como: los injertos, el manejo de semillas de plátano, preparaciones botánico medicinales, los cultivos hidropónicos y los huertos caseros, entre otros.
Frutos comunitarios
Uno de los distintivos de esta actividad es que año tras año sirve como punto de encuentro y distracción para muchas familias puertorriqueñas, las que han asistido a través de generaciones. Ese es precisamente uno de los objetivos, cumplir con la misión de las tres unidades que conforman el CCA: el Servicio de Extensión Agrícola, las Estaciones Experimentales Agrícolas y la Facultad, para enlazarse con la comunidad.
Así opinó el decano interino de ese Colegio, profesor Pedro Rodríguez, quien resaltó que se trata de una oportunidad única para el sector agrícola.
“Para nosotros es un honor que sea aquí esta actividad que ha trascendido a nivel de todo Puerto Rico y que puedan darse cita personas de toda la Isla que apoyan esta industria, tan importante en estos tiempos en los que es vital producir alimentos de calidad para nuestros consumidores. Este tipo de oportunidad trae la comunidad a nuestro Recinto y promulga la importancia de la agricultura”, destacó el Decano Interino.
En un recorrido por los predios del Coliseo Rafael Mangual, que cada año alberga la Feria y ahora se conoce como el Sendero de los Ejercicios, Prensa RUM entrevistó a varias familias para quienes ya es una tradición estar presentes.
Ese es el caso de Iris Salinas, una egresada del RUM, quien asistió desde Hormigueros junto a sus padres, su hermana y su sobrina como parte de lo que ya es un acostumbrado pasadía familiar.
“Desde que somos pequeñitas mis padres nos traían aquí al Colegio a la Feria Agrícola, porque hay animales, artesanías, gente amable que hacen que la actividad sea bonita. Además de compartir, esto es cultura porque nos enseñan y nos muestran que todavía existe la agricultura y que tenemos que seguir promulgando esto”.
De igual forma se expresó Miriam Mercado, una mayagüezana que acudió acompañada de sus dos hijas, sus dos nietas y su hermana en busca de un rato de distracción.
“A la vez que uno comparte en familia, nos orientamos. Uno aprende mucho. Vengo más por mis nietas, a montarlas en los caballos, a comprarles pollitos y a ver la artesanía”, relató.
Cosecha de líderes
La Feria brinda una experiencia ideal a los estudiantes de Ciencias Agrícolas de organizar un evento multitudinario que conlleva una gran logística por la diversidad de eventos programados para cinco días y cinco noches.
Anualmente se elige una directiva que trabaja con un año de anticipación en todo el proceso organizativo. Aunque el grupo de jóvenes cuenta con varios consejeros de la Facultad, son ellos quienes coordinan, programan y corren el evento en su totalidad.
“Es una oportunidad para nuestros jóvenes de proyectarse. Ellos van a ser los líderes de nuestra agricultura del mañana y tenemos que crear en ellos mentalidad de agroempresarios y esa conciencia de la importancia de la agricultura para que puedan seguir echando hacia delante esta importante industria en Puerto Rico”, aseguró el Decano Interino, al tiempo que agregó que la oportunidad les abre camino más adelante en los distintos campos en los que se destaquen.
Vídeo Reportaje
Una de las atracciones del evento es la venta de frutas y vegetales.
La Feria agrupa a una gran cantidad de artesanos, cuyas creaciones incluyen ropa, accesorios, bisutería, dulces típicos, jabones, velas aromáticas y pinturas, entre otros.
Cinco Días con Nuestra Tierra cuenta con una amplia exhibición de plantas, árboles frutales y flores.
Fotos por Carlos Díaz / Prensa RUM
Uno de los distintivos de la actividad es que sirve como punto de encuentro para muchas familias puertorriqueñas. En la foto, Miriam Mercado (al centro) en compañía de sus hijas y nietas. (Foto tomada del video reportaje de la fotoperiodista Graciela Muñiz / Circuito Cerrado)
Fotos de portada por Carlos Díaz / Prensa RUM
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