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viernes, 4 de abril de 2008
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El prototipo de Tarzán, una versión robótica de la mascota colegial creada por los estudiantes de Ingeniería Mecánica, formó parte de las exhibiciones. |
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Sobre dos mil estudiantes de alrededor de 50 escuelas superiores públicas y privadas de toda la Isla participaron de la casa abierta del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM) que el pasado mes de marzo organizó el Proyecto “Atrévete a estudiar en el Colegio… Te queremos” adscrito al Decanato de Asuntos Académicos.
El Coliseo Rafael A. Mangual le dio la bienvenida a los estudiantes, quienes acompañados de sus profesores -y algunos padres- conocieron “de primera mano” los ofrecimientos académicos junto con exhibiciones y demostraciones de los proyectos que llevan a cabo las diferentes facultades del Recinto. Asimismo, recibieron información sobre el proceso de admisión, ayudas económicas, actividades atléticas y agrupaciones artísticas estudiantiles, entre otras.
Según explicó la doctora Sonia Bartolomei, coordinadora de Atrévete, el propósito del evento fue educar a los alumnos, especialmente los de los grados 10 y 11, sobre los programas académicos del RUM “para que cuando vayan a solicitar estudios universitarios, tomen una decisión informada”.
"La última casa abierta que se hizo fue en el 1994, así que hacía 14 años que no se realizaba una. Decidimos que teníamos que hacer una actividad de esta magnitud para llamar la atención de los estudiantes sobre sus alternativas futuras”, apuntó la también catedrática de Ingeniería Industrial.
Y al parecer, la iniciativa rindió sus frutos ya que jóvenes como Hugo Lugo, del Colegio San Agustín en Cabo Rojo, sostuvo sin vacilar que “sería interesante” estudiar Ingeniería Mecánica en el RUM tras observar con gran entusiasmo el carro Fórmula SAE, proyecto que también formó parte de las exhibiciones.
Sin embargo, los resultados se podrán comprobar dentro de dos años, de acuerdo con Bartolomei, debido a que ya finalizó el proceso de solicitudes y admisiones para el próximo año académico.
“Estas clases las vamos a recibir en 2010 y 2011, así que ahí es cuando vamos a recibir el impacto. Pero, como quiera es muy importante porque algunos (del grado 12) que ya solicitaron (a otras universidades) hoy podrían cambiar su decisión”, señaló.
De hecho, el doctor Moisés Orengo, decano de la Facultad de Artes y Ciencias y quien acudió a la casa abierta, subrayó la importancia de efectuar ese tipo de actividades a una edad temprana para que el estudiante prospecto “pueda enfocar sus talentos y sus capacidades de forma más efectiva”.
“Esta interacción es más importante que un folleto, porque ven la cara humana de cada departamento”, afirmó.
Profesores como las doctoras Laura Bravo y Zaida Lina Torres, de Humanidades y Enfermería, respectivamente, coincidieron con las expresiones del Decano de Artes y Ciencias.
“Se les transmite el espíritu del Colegio, que somos una gran familia y que estamos esperándoles”, manifestó Bravo.
Lo mismo ocurrió con profesores de los otros tres colegios -como la decana de Administración de Empresas, Eva Zoé Quiñones y el profesor Rafael Olivencia-, quienes unánimemente calificaron la casa abierta como “un rotundo éxito”, ya que sirvió para aclarar las interrogantes de los asistentes.
“Hay mucho desconocimiento por parte de las escuelas de que existen tantos programas, porque ellos piensan que aquí solamente se estudia ingeniería, pero hemos tenido muchos estudiantes preguntándonos”, sostuvo, por su parte, el doctor José R. la Torre, director del Departamento de Industria Pecuaria, adscrito al Colegio de Ciencias Agrícolas.
Precisamente, el caso de ese departamento fue uno muy particular, ya que la casa abierta fue el vehículo para aclarar dudas de los cientos de jóvenes que, atraídos por los animalitos que se exhibieron, se allegaron a dicha área. Allí supieron que ese departamento alberga el programa de veterinaria, información que desconocían, a juicio del director.
Y no sólo los estudiantes disfrutaron del evento, también sus maestros y bibliotecarios.
“Esto ha sido muy bueno y muy interesante porque he podido empaparme de todo lo que se ofrece para transmitírselo a mis estudiantes”, aseguró Orlando Rivas, bibliotecario de la escuela José Rojas Cortés del pueblo de Orocovis. Agregó que para la mayoría de sus estudiantes esa fue la primera vez que visitaron el Colegio.
Pero, ésta no será la única casa abierta, de acuerdo con la doctora Bartolomei. Aún cuando el Proyecto Atrévete realiza visitas a las escuelas, entre otras actividades de orientación, la casa abierta se realizó con la intención de repetirla consecutivamente.
“Nuestra misión es tener más solicitudes de los mejores estudiantes cada año, por lo que vamos a celebrarla anualmente”, precisó.
En esta ocasión, el evento contó con un comité organizador presidido por el doctor Uroyoán Walker, ayudante especial del Rector, y estuvo compuesto por los decanos asociados y profesores de las diferentes facultades, al igual que personal no docente de varias dependencias administrativas.
Los estudiantes de escuela superior recibieron información sobre el proceso de admisión, ayudas económicas, actividades atléticas y agrupaciones artísticas estudiantiles, entre otras.
La doctora Sonia Bartolomei, a la derecha, orienta a unos estudiantes que asistieron a la casa abierta del Recinto.
El Coliseo Rafael A. Mangual fue la sede para que miles de estudiantes de las escuelas de nivel superior de la Isla se dieran cita en la primera casa abierta que se realiza en 14 años.
Fotos Carlos Díaz / Prensa RUM
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