Junte de voluntades para la reflexión
Por Idem Osorio
iosorio@uprm.edu
PRENSA RUM

viernes, 29 de febrero de 2008

Un colectivo de trabajo que busca un tiempo y espacio fuera de las fronteras y estructuras formales institucionales para reflexionar sobre la educación, para promover ideas, proponer planes de acción y encontrar soluciones a los problemas y retos que enfrenta la universidad.

De esa manera describen sus fundadores el encuentro Repensando la educación universitaria que se celebrará por tercera vez del 6 al 9 de marzo de 2008. Esta vez, el grupo se enfocará en discutir el alcance de la tecnología en los procesos de enseñanza desde varias perspectivas.

Sus integrantes, alrededor de 40 catedráticos del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM), formarán parte de una especie de retiro en el que colegas de todas las facultades interactuarán de manera informal -y a la vez intensa- en asuntos que afectan directamente a la comunidad universitaria.

La idea original de este evento surgió del interés en evaluar si los estudiantes que culminan su carrera académica están igualmente preparados en su formación como seres humanos y ciudadanos. Para lograr esa meta, sus organizadores han incorporado diferentes temas sobre los cuales giran sus discusiones.

“Es un sitio de encuentro de personas que están muy comprometidas con la universidad; un espacio de pensar libremente sobre asuntos que nos conciernen y preocupan a todos; una oportunidad de repensar la universidad y aportar”, precisó el doctor Antonio González Quevedo, uno de los fundadores del grupo y director de la Oficina de Investigación Institucional y Planificación del RUM.

De igual forma, dos de sus integrantes, los doctores Mildred Chaparro y Moisés Orengo, decanos de Asuntos Académicos y de Artes y Ciencias, respectivamente, enfatizaron en la necesidad de foros como éstos que usualmente no se propician.

“Son pocas las ocasiones que tenemos para dedicarnos a discutir agendas que entendemos nos pertenecen a los educadores. Separar ese tiempo es obligación nuestra. Se lo debemos a los estudiantes y a la institución. Profundizar en asuntos de nuestro interés como educadores, hace falta”, reiteró Chaparro.

González Quevedo, Chaparro y Orengo son parte del equipo fundador junto a los doctores Betsy Morales, Marisol Vera, Héctor Huyke, Noel Artiles y Jorge Iván Vélez Arocho, rector del RUM. Conocidos también como el grupo de los ocho o G-8, algunos de sus integrantes recordaron de manera jocosa cómo adquirieron ese nombre.

Explicaron que todo comenzó a lo largo de conversaciones sobre temas que les preocupaban, pero no existían foros para discutirlos. “Por ejemplo, llevábamos como 20 ó 30 años sin sentarnos a pensar sistemáticamente sobre nuestra educación general. Ha habido cambios en requisitos y comités que han trabajado algunos aspectos, pero no un tiempo de separarnos de la tarea diaria y pensar sobre esto en grande. Así, poco a poco, el Rector fue reuniendo un grupo y en un momento éramos ocho”, relató Huyke.

De igual forma, cuando el grupo se extendió a alrededor de 40 profesores para la celebración del primer encuentro, pasó a ser el G-40. No obstante, la mayoría coincidió en que lejos de la connotación de poder en alusión a la reunión de países internacionales, el grupo de los ocho o de los 40 es un foro de aportar ideas.

“Nos gusta tomar algunas acciones en términos de producir unos documentos que puedan ser utilizados por cuerpos oficiales en la toma de decisiones”, advirtió González Quevedo a la vez que aclaró que aunque algunos de los participantes pertenecen a la administración, durante el encuentro son simplemente educadores.

“Se trata de mirar las cosas con calma, desde lejos, y dar sugerencias de lo que debemos hacer y entonces pasan por los cuerpos correspondientes, pero la idea es que no sea una estructura de gobierno de la universidad”, subrayó, por su lado, Huyke.

Coincidió la doctora Betsy Morales, quien agregó que el norte es generar planes de acción.“Siempre trabajamos hacia una meta que es tratar de conseguir posibles soluciones a lo que debemos mejorar”, sostuvo.

Este año, el tercer encuentro lleva por título Haciendo universidad ante los retos de la tecnología y aunque incluye cuatro temas independientes, todos tienen en común el componente tecnológico.

Según explicaron los organizadores, los trabajos comenzarán con la discusión de la imagen cibernética del Recinto que cubrirá cómo funciona la página uprm.edu y cuál es el proceso de escoger lo que la compone.

De la mano con ese tema, se ofrecerá la charla sobre la integración de la tecnología en los procesos de enseñanza y aprendizaje a cargo de los doctores Mario Núñez, decano asociado de Avalúo y Tecnologías del Aprendizaje del Colegio de Artes y Ciencias del RUM y Juan Meléndez, del Recinto de Río Piedras de la Universidad de Puerto Rico

Mientras, Jesús Colón de IBM presentará el estudio Higher Education 2012: Leading in the Learning Economy, Increased use and reliance on technology. Asimismo, por segunda ocasión el doctor Jorge Ferrer, del RUM, será quien diserte sobre la integridad académica que se enfoca en la investigación científica y, por ende, el uso de la tecnología para ese fin.

Por último, los catedráticos explicaron que se integró este año el componente de búsqueda de información en la biblioteca, que será presentado por Craig Gibson, bibliotecario asociado de George Mason University y quien tendrá a su cargo el taller Information Literacy: A Catalyst for Educational Reform.

El equipo de trabajo destacó que los resultados del encuentro son recopilados en unas memorias que se publican, se distribuyen a la comunidad universitaria y están disponibles como referencia. Los primeros dos escritos contarán próximamente con una versión electrónica en la página de Rectoría del Colegio. Reiteraron que muchos de los planes de acción propuestos por el grupo han trascendido a proyectos en concreto que se realizan ya en el Recinto.


Siete de los fundadores del encuentro Repensando la educación universitaria. De izquierda a derecha: los doctores Noel Artiles, Héctor Huyke, Betsy Morales, Marisol Vera, Mildred Chaparro, Moisés Orengo (de pie) y Antonio González Quevedo.

Foto Carlos Díaz / Prensa RUM