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viernes, 20 de julio de 2007
Diversión y educación. Ambos elementos se integraron en el primer campamento de verano dirigido a los hijos y familiares del personal del Servicio de Extensión Agrícola (SEA) que laboran en el edificio C del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM).
En el programa educativo-recreacional, organizado por el Programa de Juventud y Clubes 4-H del SEA, participaron 15 niños entre las edades de 8 a 13 años, indicó el profesor Andrés Irizarry Carlo, especialista 4-H quien junto a Vanesa Alequín de la oficina de Igualdad Oportunidades de Empleo y Acomodo Razonable del RUM, coordinó esta actividad.
“La iniciativa surgió por la inquietud de los empleados de que se les ofreciera a sus hijos un campamento educativo en el que pudieran divertirse y a aprender a la vez”, explicó Irizarry.
Precisamente, según indicó, durante la semana del 9 al 13 de julio los niños fueron de excursión a una granja avícola, a una vaquería, a Isla Magueyes y al Zoológico de Mayagüez. También, participaron de una conferencia sobre los corales y en talleres sobre el uso de las computadoras. Igualmente, disfrutaron de actividades recreativas.
“La experiencia que más pareció gustarles fue la visita a la Isla Magueyes en la Parguera, Lajas. Allí disfrutaron, algunos de los participantes por primera vez, del paseo en lancha, la visita a los canales que separan los Islotes de La Parguera y del contacto con la vida marina”, indicó.
Agregó que esta experiencia complementó la conferencia que recibieron sobre el tema de los corales. “Eventualmente disfrutaron de un rico ‘chapuzón’ en las cristalinas aguas de este hermoso lugar de nuestro Puerto Rico”, sostuvo.
Durante el evento sirvieron como recursos educativos los agrónomos Ignacio Machado y Carlos Saavedra, agentes agrícolas del SEA. También colaboraron los profesores Carlos Nazario y Juan B. Fremaint, especialistas en aves y en educación de computadoras, respectivamente.
Irizarry enfatizó que el campamento cumplió con los objetivos del programa de Juventud y Clubes 4-H que aspira ofrecer a sus socios la oportunidad de entretenerse al tiempo que se desarrollan las relaciones sociales constructivas. Asimismo, que los niños desarrollen el amor hacia la naturaleza.
Los niños durante su visita a la Vaquería Ceiba del Mar en Hatillo.
Los participantes durante una excursión educativa a una granja avícola.
Una de las actividades que más disfrutaron fue la gira a Isla Magueyes.
Juan B. Fremaint les ofreció un taller sobre el uso de computadoras.
15 niños entre las edades de 8 a 13 años se integraron en la experiencia educativa.
El agrónomo Ignacio Machado ofreció la conferencia Larga vida a los corales.
Los jovencitos visitaron también el Zoológico de Mayagüez.
Fotos: Suministradas
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