Los retos de la violencia
Por Idem Osorio
iosorio@uprm.edu
PRENSA RUM

viernes, 22 de junio de 2007

Las estadísticas de violencia en Puerto Rico son abrumadoras. Asimismo, el deterioro, la pobre calidad de vida y el desasosiego que genera este fenómeno lo convierten en uno de los problemas más preocupantes del País.

Con esto en mente, el departamento de Ciencias Sociales (CISO) del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM) llevó a cabo recientemente el Primer simposio anual de retos sociales: violencia y criminalidad en el que se analizó el tema desde distintas ópticas.

“La actividad complementa el trabajo de CISO en torno a su misión de preparar al estudiantado para atender los retos sociales utilizando los conocimientos derivados de la investigación y para que la comunidad en general participe en la discusión de alternativas eficaces”, precisó la profesora Milagritos González, una de las organizadoras del evento.

De hecho, el Comité Coordinador del Simposio anunció en la apertura que contempla continuar su celebración anual con el análisis de otros problemas y retos sociales desde perspectivas académicas viables y fortalecer así la contribución a la sociedad puertorriqueña.

Por su parte, el licenciado José Frontera, quien asistió al evento en representación del rector del Recinto, doctor Jorge Iván Vélez Arocho, recordó que el Simposio forma parte de la responsabilidad que tiene la institución en la formación de una generación. “Es una manera de ayudar a rescatar la conciencia de los valores fundamentales y poner respuesta a la reconstrucción de las propias capacidades y de la valorización de la persona humana. En esa medida, nosotros como universidad tenemos la responsabilidad de esa reconstrucción, formando a nuestros estudiantes”, aseguró.

Académicos, investigadores, representantes del gobierno y líderes sindicales se dieron cita en un concurrido anfiteatro Ramón Figueroa Chapel para aportar sus conocimientos y arrojar luz sobre los problemas que causan la violencia. De igual forma, se identificaron alternativas existentes como posibles soluciones a estos retos.

El Simposio contó con un día completo de ponencias y diversos paneles que cubrieron proyectos de reducción y manejo de agresividad en las escuelas así como esfuerzos por reducir la violencia en la familia. De igual manera, se analizaron elementos culturales y gubernamentales que promueven o provocan violencia; se habló de la relación entre la corrupción y la violencia así como de los problemas de interpretación de estadísticas de violencia y criminalidad.

La conferencia plenaria estuvo a cargo del doctor Salvador Santiago Negrón, presidente saliente de la Comisión para la Prevención de la Violencia (COPREVI), quien señaló que la violencia es un problema de salud pública y, por ende, requiere que se adopte un modelo salubrista cónsono con los postulados de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Santiago Negrón presentó datos estadísticos de la violencia en Puerto Rico y manifestó que mientras la comunidad se ha destacado por trabajar estrategias de prevención, el gobierno implanta medidas de intervención. Sin embargo, añadió, que hace falta consenso.

“Esa fisura se debe, en parte, a la ausencia de un plan estratégico nacional para prevenir y mitigar la violencia, y a que el paradigma dominante es de ley y orden. Por esto, se hace difícil reconocer que la violencia en Puerto Rico se comporta como una epidemia que impacta la salud pública”, reiteró.

Por último, el investigador recomendó mirar la experiencia de países con tasas bajas de criminalidad y violencia; así como comprometer a todos los sectores de la sociedad en el esfuerzo por erradicar esos problemas. “El conocimiento lo tenemos. Lo único que nos hace falta es voluntad política y una sociedad civil militante que le crea a los políticos más allá de los cuatro años”, señaló.

El evento, que además contó con el auspicio de la Oficina del Rector, se dedicó a la memoria del estudiante Belford Ramírez.


El doctor Salvador Santiago Negrón, presidente saliente de la Comisión para la Prevención de la Violencia (COPREVI).

Foto Carlos Díaz/Prensa RUM